The Dirty Onion and Yardbird
Restaurante | Belfast | Northern Ireland | Reino Unido
Música irlandesa tradicional en el pub
„The Dirty Onion and Yardbird“ es un dúo único de restaurante y pub en Belfast, Irlanda del Norte, Reino Unido, que combina la tradición y la cocina moderna en uno de los edificios más antiguos de la ciudad. Se encuentra en el corazón del vibrante Cathedral Quarters y consta de dos experiencias distintas pero conectadas: “The Dirty Onion”, un pub irlandés tradicional en la planta baja, y “Yardbird”, un restaurante de pollo a la rotisserie en el piso superior. Esta combinación hace del lugar un atractivo popular para locales y turistas que buscan tanto la auténtica hospitalidad irlandesa como comida de alta calidad.
Visitar el jardín de cervezas en Belfast
El edificio en sí es una pieza de historia. Data de 1780 y se considera la estructura más antigua de Belfast que aún se conserva. Originalmente, a partir de 1921, sirvió como almacén de bebidas espirituosas y llevaba el nombre de “STACK N”, lo cual se puede reconocer aún hoy por una gran “N” roja en la fachada. La característica estructura de madera exterior ha sido cuidadosamente restaurada y hoy enmarca el jardín de cerveza, que se considera uno de los más grandes en Belfast. En el interior, los techos bajos con vigas de madera expuestas y las paredes de ladrillo sin enlucir cuentan la historia del pasado, mientras que elementos modernos como un amplio patio añaden un toque contemporáneo. Especialmente en los meses más fríos, un acogedor fuego de turba en el pub invita a calentar el cuerpo, mientras que el jardín de cerveza es un lugar destacado para los días soleados en verano.
Experiencia de hospitalidad irlandesa auténtica
“The Dirty Onion” es el corazón de la planta baja y un pub irlandés clásico, conocido por su ambiente animado. Aquí, la música está en el centro de todo: siete noches a la semana hay actuaciones en vivo, con un enfoque en la música irlandesa tradicional, así como bandas contemporáneas y sesiones acústicas. Especialmente los domingos, las tradicionales “Trad Sessions” atraen a la multitud, y los sábados se celebra hasta altas horas de la noche. La oferta de bebidas es extensa y refleja la rica cultura de la bebida: desde cervezas artesanales locales como el “Yardsman Belfast Pale Ale” hasta una impresionante selección de whiskies irlandeses, que también forman parte de visitas guiadas de whisky por Belfast. El pub evita las reservas deliberadamente y vive bajo el principio de “primero en llegar, primero en ser servido”, lo que subraya la espontaneidad y el ambiente social.
Restaurante de pollo a la rotisserie en Belfast
En el piso superior, “Yardbird” ofrece una experiencia culinaria centrada en el pollo a la rotisserie. La filosofía aquí es sencilla: alimentos de alta calidad, servidos rápidamente y con grandes sabores. El “Rotisserie Chicken” es la estrella del menú: pollo de libre pastoreo de origen local se marina durante 24 horas en una mezcla de limón, suero de leche y pimentón, se sazona en seco, se cocina y se asa perfectamente en el espeto para mantenerlo jugoso y sabroso. Es especialmente popular en combinación con acompañamientos como “Sweet Potato Fries” o como parte de la oferta “Booze’n’Bird”, que incluye un pollo entero con dos guarniciones y bebidas. Las “BBQ Ribs” también son un acierto con su textura tierna y glaseado sabroso. “Yardbird” es apto para familias y ofrece un ambiente relajado que se diferencia de la animada atmósfera del pub abajo. Cuando hay mucha gente, hay un práctico sistema de botones que permite a los clientes del pub esperar hasta que se libere una mesa.
Edificio histórico en Belfast
La cocina de “Yardbird” se adhiere a un concepto pequeño pero bien pensado, que además del pollo incluye opciones como “Wings” con diferentes glaseados, como “Buffalo” o “Smoky Chipotle”. Todos los platos se preparan frescos en el lugar, y la cocina abierta permite vislumbrar el proceso de preparación. Para los amantes de los postres, hay opciones caseras que completan la comida. Los platos están diseñados para ser satisfactorios y mantener el enfoque en la calidad y el sabor, lo que hace del restaurante un favorito para los amantes del pollo.
La historia del lugar está marcada por su larga trayectoria como almacén, pero la transformación en un dúo de pub y restaurante le ha dado nueva vida. La restauración preservó elementos históricos como la fachada de madera y las paredes de ladrillo, mientras que las modernas adiciones como el patio y la cocina de rotisserie brindan comodidad contemporánea. El personal es conocido por su amabilidad y competencia, ya sea recomendando un whisky en el pub o brindando servicio en “Yardbird”. Sin embargo, en días concurridos, puede llenarse y ser ruidoso, lo que puede no ser del agrado de todos, pero a menudo se considera parte de la experiencia auténtica.